LIBRE

Libre. Libre como el viento. Libre como tu misma quieres ser. Libre como tus pensamientos. Libre como toda tu.
Si hay algo que anhelo más que tu amor, es tu libertad.
Quiero amarte siendo tu.
Y si hay algo que anhelo más que tu libertad es tu amor libre.
¡Corriendo prados, montes y valles! ¡Surcando los aires como el viento! Colándote en todas partes.
¡Alertar a todo el mundo que tu mera presencia se acerca!
Que tu alegría inunde hasta el último poro de mi piel!
¡Ay que bonito seria morir ahogado por tu alegría! Morir con la alegría de aquel ser que más amas. ¿Hay acaso una muerte más romántica que está? No.
Tu sonrisa. Tus ojos. Tu alma. ¡Me gritan nadar en las aguas de la libertad, pero temo hacerlo!
¿¡Cómo no temer!? Cómo no temer ensuciar esas dulces aguas cristalinas que reflejan nuestra alma... cómo no temer...
Prefiero verte, amarte, así. Libre. Lejos de mi.
Mira cuan grande es el amor que siento por ti, que me conformo con amarte desde la distancia.
Y es que si no te amo así, temo amarte a la cercanía y apagar esa alegría cuya energía, ¡ha alegrado a los campesinos y a los piratas!
¡A las costureras! ¡Y a los costureros!
¡A los reyes! ¡Y a las reinas!
¡A los vivos! ¡Y a los muertos!
Si... está decidido. Te amaré como el sol ama a los árboles. Lejos. Pero cuya calidez llega sin fallarles.